Mil cosas que contar a la vuelta, cuando te vuelvas a reunir con esas personas que quizás no has visto mucho, porque no han estado aquí. Mil locuras. Mil alegrías, y quizás algunas penas, pero todo forma parte de este verano.
Que para mí no ha sido por encima de los demás, ni tampoco por debajo, ha sido único a su manera. Quizás un poco aburrido, sí, pero al menos he tenido tiempo de divertirme, de descansar, no mucho, pero de no agobiarme demasiado, de pensar, de reflexionar, y de ir cargada de esas buenas intenciones que todo el mundo hace para la vuelta al cole, pero que nunca se cumplen.
Pero este año, las cumpliré.

Porque será mi último año en el colegio, y no quiero que sea un año agobiado, con exámenes suspensos y mil recuperaciones.
No quiero irme con un mal sabor de boca, ni tampoco repetir, así que…
Aunque seguro que echaré de menos ese colegio, al fin y al cabo llevo allí desde los 4 añitos, pero bueno, la entrada ñoña y nostálgica de despedida del colegio, ya la haré al año que viene, jaja.
Y bueno, una breve entrada, y no muy currada, lo sé, pero mi inspiración, también se ha ido de vacaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario